Mi hijo el doctor...
Don Florencio
Linda obra se mandó don Florencio cuando escribió "Mi hijo el doctor... " tan actual como las últimas noticias del País. Sí que pegó en el clavo cuando sentenció a la querida sociedad capitalina que tanto hace diferencias a los titulados y sin titular.
¿A qué viene eso?
Leyendo una artículo de un entrevistador de programadores, me desayuné que en el norte están tan desilucionados como acá en el sur con los profesionales universitarios(dotore', contadore', ingeniero', etcéteras).
La reflexión, boba, pero que me viene es:
¿Por qué no nos dejamos de joder un poco y lo aceptamos?
Siempre van a existir ineptos que, con o sin título bajo el brazo, estén en algún lugar que no debieran (y si tienen dudas capaz que el Prinicipio de Peter lo explica bien).
¡Ojo! ¡Tampoco tomárselo a la extrema y me empiecen a tildar de facho!
Sucede que si, de ves en cuando, bastante a menudo somos ineptos, hasta para cosas sencillas. Pero el tema va más que nada por adaptarse, no por traumarse o discriminar a otros.
Igual creo que se precisa una "energía extra" para no calentarse, y a veces simplemente no dá la pila...
Pero bueno, si bien a veces la capacidad de ineptitud que tenemos las personas es asombrosa; más asombrosas es la capacidad de cambio y de mejorar que tenemos, será qeu simplemente no tenemos suficiente práctica (además sabiendo que esta sociedad no lo estimula).
Doctores o no
Doctores o no, por suerte tenemos escalas "más mejores" que los títulos nobiliarios de la actualidad, capáz q lo mejor es darle bola.